Mexicanos crean Roki, el robot que ayuda a las personas con discapacidad para que puedan caminar.
En un principio Norberto Velázquez y sus amigos creaban robots humanoides que jugaban fútbol y soñaban con darle un uso práctico a esa tecnología.
No obstante, muchos años después, tras conocer a personas en sillas de ruedas que vieron cómo sus robots podrían ayudarlos.
Así nació Roki, un exoesqueleto robótico que ayuda a las personas a caminar, previene la aparición de úlceras de presión causadas por el uso excesivo de la silla de ruedas, al tiempo que fortalece los huesos y mejora la circulación y la digestión, explica el emprendedor.
“El exoesqueleto es un traje robótico con dos piernas que se amarran a las piernas de la persona y se conectan a una mochila que tiene una batería y ahí están los algoritmos de movimiento”, explica Velázquez, egresado de la UP Guadalajara.
Este año, Roki comenzó a ser una esperanza sólida, ya que está disponible en una clínica de Guadalajara llamada SIGUE, el cual está ayudando a 35 personas.