Luis Bracamontes, el mexicano indocumentado, que fue deportado varias veces y con un historial delictivo, fue condenado hoy a la pena de muerte por la muerte de dos policías en California(EEUU) en octubre de 2014.
Bracamontes disparó contra Oliver fuera de un motel en Sacramento, lo que desencadenó una persecución de 48 kilómetros que duró horas y terminó después de que el mexicano le disparara a Davis y se rindiera tras un largo enfrentamiento, así lo describió la acusación.
Durante el juicio Bracamontes gritó en la corte que era culpable y pidió que lo mataran; incluso al escuchar hoy la sentencia, el mexicano, que mostró en el juicio una conducta agresiva e insultante, sonrió y “aplaudió silenciosamente”, según una descripción ofrecida por el diario Sacramento Bee.
Cabe destacar que Janelle Monroy, de 41 años, esposa de Bracamontes y quien estuvo con él durante los hechos, fue hallada culpable del asesinato del detective Davis y de otros nueve cargos en febrero.
El 23 de marzo Monroy fue condenada a 24 años en prisión a cumplirse previamente a otra sentencia de entre 25 años y cadena perpetua por asesinato.