La exsoldado Manning había sido condenada a 35 años de prisión por ser la primera gran fuente de WikiLeaks, sin embargo el día de ayer salió de prisión luego de siete años de estar privada de su libertad gracias al perdón que le otorgó el ex presidente de Estados Unidos, Barack Obama por el arrepentimiento que mostró al filtrar en 2010 un número récord de documentos de la guerra de Irak y de Afganistán, así como cables del Departamento de Estado del país vecino.
Un portaoz del Ejército confirmó a Efe que Manning salió hoy la prisión de seguridad media de Fort Leavenworth (Kansas), sin embargo rechazó el otorgar más detalles por motivos de privacidad.
Luego de ser sentenciada a 35 años de cárcel, Manning anunció que se sentía mujer y pidió que se dejra de usar su nombre de nacimiento, Bradley, para cambiar a Chelsea.
Nancy Hollander, su abogada, dijo a Efe que Chelsea había vivido los últimos meses con “ansiedad” pues ansiaba poder salir de prisión para completar su tratamiento de cambio de sexo que comenzó en la cárcel militar de Kansas.
“Ha sido muy difícil para ella vivir como una mujer en una cárcel para hombres, el Ejército la obligó a cortar su cabello cada dos semanas como un hombres, en detrimento de su bienestar emocional. Ha sido muy difícil para ella y está feliz de poder salir y vivir como la mujer que es”, explicó su abogada.
Tan sólo el año pasado Manning trató de quitarse la vida dos veces y logró reponerse gracias a un grupo de voluntarios.
La semana pasada, en su primera declaración pública desde que fue condenada, Manning comentó que espera “poder trabajar para mejorar la vida de los demás” cuando se encuentre fuera de prisión, sin embargo no dio detalles acerca de ello.
“Espero aplicar las lecciones que he aprendido, el amor que me han dado y la esperanza que tengo para trabajar para mejorar la vida de los demás” así lo declaró Manning a través de un comunicado distribuido por su equipo legal y donde además expresó su agradecimiento a sus simpatizantes y a Obama.
Ahora que está en libertad, Manning continuará formando parte del ejército estadounidense, aunque se encontrará de baja mientras se procesa el recurso que presentó contra su condena, la cual incluía una pena de 35 años de prisión y su expulsión del cuerpo militar.