De acuerdo con información de medios locales en China, la última hembra de tortuga gigante de caparazón blando del Yangtzé ha muerto, lo que potencialmente condena a la especie a la extinción.
Se cree que la tortuga hembra tenía más de 90 años, la cual murió el sábado más de 24 horas después de que personal local, junto con expertos internacionales, intentara inseminarla artificialmente, informó el periódico local Suzhou Daily.
Se explicó que no hubo complicaciones por el intento de inseminación artificial, pero que un equipo de investigación integrado por expertos nacionales e internacionales realizaría una autopsia para determinar la causa de la muerte.
El diario Suzhou Daily dijo que los expertos recolectaron muestras de tejido ovárico y las almacenarían “para un futuro uso”.
Por su parte, la organización Wildlife Conservations Society considera que la tortuga gigante de caparazón blando del Yangtzé es la especie de tortuga en peligro de extinción en mayor riesgo en el mundo, y su desaparición se debe a la caza y a la destrucción de su hábitat.
El zoológico de Suzhou alberga un espécimen macho de tortuga de caparazón blando gigante del Yangtzé. Los otros dos viven en Vietnam, pero sus géneros son desconocidos. Ambos viven en la naturaleza, según un informe publicado por The New Yorker en diciembre.