Varsovia, Polonia.
Curas católicos originarios de Polonia, quemaron a diestra y siniestra libros de distintos giros y temas, entre los que destacaban la serie del mago mundialmente conocido “Harry Potter”, además de ello la saga vampírica juvenil “Crepúsculo”, entre otros tantos más.
Los sacerdotes aseguran que estos tomos tenían fuerzas demoniacas, y que además este tipo de literatura es enemiga de Dios.
Imágenes de la quema realizada el domingo en una iglesia de Gdansk fueron publicadas en Facebook por la fundación católica SMS z Nieba, la cual usa medios poco convencionales para realizar sus actividades religiosas.
Pologne : à Koszalin, au nord-ouest, une paroisse a organisé un autodafé, brûlant des "livres de magie", en citant des passage de la Bible.
Parmi les objets brûlés : Harry Potter, Twilight, un livre sur l'hindouisme ou encore un masque africain.https://t.co/hnShV49346 pic.twitter.com/VKYb8qDlZY
— Wills (@Wills218) March 31, 2019
En las fotografías se puede apreciar una mascara de madera, proveniente de la cultura africana, una figura pequeña budista y demás figuras como elefantes, todos estas provenientes de culturas de otros países.
Y que mencionar de los libros que fueron quemados, entre los que destacan las obras literarias de la escritora británica J.K. Rowling. Todos los libros fueron llevados por feligreses, quienes aseguran que haciendo este tipo de actos, sacan al demonio de sus hogares
La iglesia católica, que tiene mucho poder en Polonia, está en contra de los libros de “Harry Potter”, pues dicen que promueven la brujería.
La fundación dijo que la quema de libros tenía la intención de alertar a los fieles contra las malas influencias que supuestamente vienen con la magia y las ciencias ocultas.
Múltiples usuarios de Facebook condenaron la quema de los libros, recordando que esto también ocurrió en la Alemania nazi antes de la Segunda Guerra Mundial. Algunos dijeron que esto envía un mensaje de intolerancia y preguntaron si las próximas en ser quemadas serían brujas como en la Edad Media.
El evento fue criticado por el reverendo Wojciech Parafianowicz, vocero de la diócesis de Koszalin, donde tiene sus oficinas la fundación, quien señaló que estas actividades eran incorrectas.
Pero al hablar con el sitio noticioso wpolityce.pl, Parafianowicz argumentó que las ciencias ocultas y la magia “tienen una mala influencia en la vida humana”.
Un comentarista popular sobre religión, Pawel Guzynski, quien es un fraile dominico, dijo en Facebook que la quema fue “más bien la caída de la fe sabía que de la superstición insensata”.
Polonia es un país de mayoría católica y tiene el apoyo de múltiples miembros del gobierno conservador.