El día de hoy Morena presentó en la Cámara de Diputados una reforma a la Constitución para crear la Guardia Nacional, la cual estará integrada por las policías militar, naval y federal -que desaparecen- y que funcionará “en tanto persista la crisis de violencia e inseguridad en el país”.
La Guardia Nacional estaría al mando directo del Presidente, adscrita a la Secretaría de la Defensa Nacional y tendrá atribuciones en materia de seguridad interior y de seguridad pública.
La iniciativa prevé que su actuación estará sujeta a revisión por parte del Presidente y del Congreso, que deberán convocar a una consulta para revisar la política de seguridad en un plazo de tres años.
Para no tener que legislar en materia de seguridad interior y permitir que militares participen en tareas de seguridad pública, Morena incluyó un artículo transitorio, que define: “los miembros de la policía militar y naval adscritos a la Guardia Nacional quedan exceptuados de la prohibición a que se refiere el artículo 129 de esta Constitución”.
El citado artículo define: “en tiempo de paz ninguna autoridad militar puede ejercer más funciones que las que tengan exacta conexión con la disciplina militar”. Esto, porque además, los policías militares y navales que serán transferidos en su totalidad a la guardia civil conservarán sus rangos, salarios y antigüedad.
De igual forma, se prevé que el Presidente por decreto emitirá las disposiciones “para el cumplimiento de lo dispuesto en los artículos transitorios. Dichas disposiciones deberán indicar los plazos, procedimientos, normas y lineamientos respectivos” para la operación de la guardia”.
También, el segundo transitorio da facultades al Presidente para emitir un decreto para que las funciones, elementos, recursos materiales y financieros de la Policía Federal se transfieran a la Guardia Nacional
“Asimismo, se deberá asegurar la transición ordenada de los miembros de la Policía Militar y Naval a la Guardia Nacional en los términos y condiciones que al efecto se determinen con la Secretaría de la Defensa Nacional y la de Marina de manera conjunta”, añade.
El tercero señala: “Las leyes secundarias que se expidan con motivo del presente decreto, deberán prever los esquemas y modalidades para la certificación de capacidades y acreditación del control de confianza de los elementos que se adscriban a la Guardia Nacional, así como para su profesionalización y disciplina.
“Dichas leyes garantizarán una efectiva formación en las materias de protección de los derechos humanos y perspectiva de género en el desempeño de sus funciones”.
Aunque se trata de una reforma a la Constitución, en los mismos transitorios se prevé que la guardia nacional será de carácter “transitorio”.
Con información de la Jornada