Según el titular de de la Dirección General de Aeronáutica Civil, Luis Gerardo Fonseca, el accidente de un avión de Aeroméxico en Durango, el pasado 31 de julio, no fue provocado por un aprendiz de piloto no autorizado en la cabina, afirmó Luis Gerardo Fonseca, titular de la Dirección General de Aeronáutica Civil.
Fonseca aseguró en una entrevista a Televisa, que el aprendiz ocupó la posición del copiloto en el despegue, con aprobación del comandante de vuelo, es decir, el aprendiz inició el procedimiento de despegue hasta que el comandante asumió el mando total de la aeronave.
Esto porque la comisión investigadora detectó una sesión de entrenamiento no autorizada en el avión accidentado después de analizar los registros de voz de la cabina; sin embargo, Luis Gerardo Fonseca dijo que se analiza la grabación de voz en cabina para determinar el momento, pero reiteró que la presencia del aprendiz no autorizado no fue la causa del accidente y que, como parte de la investigación, se han recreado las condiciones de vuelo en ejercicios de simulación y todos han dado el mismo resultado.
En cuanto al clima de ese día, Fonseca explicó que el control climatológico se realiza en varias etapas y un equipo de especialistas analiza periódicamente los eventos para dar aviso a las tripulaciones y las autoridades aeroportuarias sobre los eventos climatológicos que pueden afectar la seguridad.
Asimismo mencionó que la microrráfaga, que afectó al avión de Aeroméxico, es una columna que desciende de manera muy fuerte y al impactar el suelo irradia ráfagas de viento y agua durante un periodo de 2 a 5 minutos y en un radio no mayor a 4 kilómetros, por eso no necesariamente se puede detectar, ni siquiera con la tecnología más sofisticada.
Finalmente Luis Gerardo Fonseca insisitió en que, de acuerdo con la investigación oficial, no hay hasta el momento indicios de fallas humanas que hubieran provocado el accidente.