La administración estadounidense podría imponer a principios de julio aranceles a las importaciones chinas por valor de 34 mil millones de dólares, por lo que las autoridades chinas se preparan para afrontar una posible guerra comercial que ya ha hecho caer las bolsas y el yuan y podría afectar a la economía del gigante asiático.
De acuerdo con Gregory Daco, de la consultora Oxford Economics, “El crecimiento chino podría verse reducido en 0,3 puntos en 2019, pero el impacto podría ser mucho más importante” y afectaría tanto a las multinacionales como a los mercados y a los inversores por la “incertidumbre”.
Debido a la caída de un 4% de la bolsa de Shangái el 19 de junio, consecuencia de nuevas amenazas de Donald Trump, el gobernador del banco central, (PBOC), pidió “calma y racionalidad” a los inversores, asegurando que la institución frenará los “choques exteriores”.
Además el PBOC anunció el domingo la reducción en 50 puntos básicos del porcentaje de reservas obligatorias de la mayoría de bancos chinos, una medida que quiere estimular el crédito a las pequeñas empresas con un total de 700 mil millones de yuanes (91 mil millones de euros).
La medida empezará a aplicarse el 5 de julio, un día antes de la posible entrada en vigor de los aranceles estadounidenses.
Cabe destacar que una nota revelada por Bloomberg, la institución considera que la prioridad de las autoridades financieras y económicas chinas en los próximos años debería ser “evitar que llegue [el pánico financiero]y se extienda”.