La noche del miércoles 23 de mayo, la policía del estado Utah, Estados Unidos, anunció el hallazgo del cadáver de la joven mexicana Elizabeth Laguna, desaparecida en abril de 2015, en un cañón de la localidad de Springville.
Las autoridades, que ya iniciaron una investigación por homicidio, identificaron a la joven mexicana por medio de sus registros dentales, señalan hoy medios locales.
El cuerpo fue localizado por un hombre que detuvo su auto en una carretera que pasa por el cañón Hobble Creek y se apartó de ella para hacer sus necesidades en unos arbustos cercanos, donde halló en cadáver y llamó a la Policía.
Elizabeth Laguna tras un trabajo como misionera en Pachuca, México, para la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, se trasladó a Utah, a donde había llegado un mes antes de su desaparición.
En los días siguientes al suceso, sus padres, Julio César y Libertad, viajaron desde Chiapas, México, a Utah, con una visa humanitaria para estar presentes durante la búsqueda de su hija y pedir la colaboración ciudadana.
La policía local y el FBI tienen previsto ofrecer más detalles del hallazgo y de sus investigaciones en una rueda de prensa.
Mientras tanto, la familia en México fue informada este miércoles de que el cuerpo hallado era el de Elizabeth Laguna.