Acompañado de un grupo de mexicanos, el Papa Francisco rezó por las víctimas que perdieron la vida en el terremoto de 7.1 grados que azotó la tarde de este martes al centro de la República Mexicana.
De forma imprevista al concluir su audiencia pública en el Vaticano, el Papa hizo una invitación a un grupo de niños cantores tlaxcaltecas, frente a miles de personas congregadas en la Plaza de San Pedro.
Su Santidad, escuchó a los integrantes del coro de pequeños indígenas “Voces Yumhu”, quienes cantaron para él Cielito Lindo en lengua otomí.
“El Papa llegó con nosotros, nos dijo que cantábamos muy bien, pero sobre todo se detuvo a orar por la gente que en México ayer sufrió un terremoto terrible que dejó muchos heridos, muchos muertos y él rezó con nosotros para pedir por todos ellos”, contó Josafat Carpinteyro Díaz.