El Partido del Trabajo, se mostró a favor de bajar el precio del diésel y gasolinas como una medida para contrarrestar el robo de combustible que se ha elevado fuertemente en los últimos meses.
Magdalena Núñez Monreal, comisionada política del Partido del Trabajo (PT) en la Ciudad de México, destacó que la gasolina deberá tener un precio de 10 pesos por litro, para que los consumidores no opten por el mercado negro.
Consideró que este problema es preocupante pues la extracción ilegal de combustibles afecta de forma significativa las finanzas nacionales al tener que pagar el combate a delitos como este.
Asimismo, recordó que existe una propuesta en el Senado para bajar el precio a este nivel, lo cual ayudará a no gastar dinero en el combate al delito y la cancelación de tomas clandestinas.
En la propuesta se establece que el costo de producción real de los combustibles es de 5.70 pesos, con lo cual las estaciones de servicio podrían ofrecer en 10 pesos el litro, ayudando en la conserva de la recaudación de recursos para el gobierno federal.