Dieciséis parejas chinas se casaron en el aire, haciendo al cielo y la tierra testigos del momento de mayor importancia en su vida.
Las bodas se realizaron en Yunan, donde la primavera ya ha llenado el campo con flores amarillas.
Dieciséis parejas chinas se casaron en el aire, haciendo al cielo y la tierra testigos del momento de mayor importancia en su vida.
Las bodas se realizaron en Yunan, donde la primavera ya ha llenado el campo con flores amarillas.